Wednesday, June 10, 2009

Doña Isidra

Debió haber vivido una niñez dura.
Debió haber sido vendida a su marido, usada como muchacha de la limpieza con innumerables maltratos de sus patrones.
O más bien nació mal pedo. Asi, sin que hicieran arisca a la burra, nomás asi salio.

Nunca, nunca desde que tengo uso de razon, ni un solo día he dejado de verla sin usar ese horrible atuendo cuasi juchiteco. A diario, usa unas enaguas floreadas, una blusa simi tipica, un chongo, huaraches y un gran collar de oro, ajá, de esos asi como de atuendo de tehuana. DIARIO.
Cuando hace frio, fácil! un jorongo grueso, donde unos 50 borregos deben haber muerto para su elaboracion.
Así, así de sencillo, despierta y elige el primer faldón, si no es que el que usa de pijama,luego para desayuno prepara sus totopos con queso sello rojo salaado salaado y cafe con leche bronca.
Le grita a su esposo, quien siempre he creido esta cautivo bajo algun hechizo juchiteco. El tipo es fiel y abnegado, le chinga y trabaja y trabaja de sol a sol para comprarle muchas enaguas floreadas.
Es un señor de oficina, el de traje, corbata lilita y zapato florsheim sin falla. Se levanta temprano y luego de desayunar su queso salaado salaado lava su carro, un passat nuevecito, bonito bonito, mientras ella, desde el balcón le grita.. AAAAleeeee AAAAAAAAlee!!!!! levantas la basura de tu caarrro... Y mas mandamientos imperativos para que el don deje la banqueta impecable (si, para que ella no moje sus huaraches y sus patas de tlayuda) -que, dicho sea de paso, doña Isidra prepara unas tlayudas celestiales, algo bueno habia de tener no?-.
Sus hijos son como aquella representacion del profesor chiflado cuando es gordo gordo, ambos se han casado con sendas juchitecotas, y han tenido sendos hijotes, gordos gordos, sordos sordos...Pues sus padres les gritan una y otra vez que ya le paren a su desmadre, que no avienten al perro por las escaleras, que no truenen cohetes bajo el carro, que nose roben los calzones de las vecinas...y pues no, nomas no oyen...

De niña Doña Isi me aterrorizaba. Se asomaba por su ventana y odiaba la felicidad de los niños que juegan quemados con una pelotota que huele a uva. Mi pelota que olia a uva.
Un dia, jugaba con mis amigos de la cuadra, quemados, pegabamos en el poste al lado de su casa y corriamos y ps ya saben la mecanica del juego no?. Para mi desgracia la pelota se metio a su puerta, que estaba abierta para ese momento. Me meti, asi con los tanates que te da tener 6 años, porque tenia que recoger MI pelotota de uvota, no la dejaria ahi, expuesta a que le pusieran un faldon de flores. Entro y lo primero que veo es a doña Isi, con mi pelota en la mano, sonriendo demoniacamente y asi con si voz rasposa, ronca pero aguda y desagradable me dijo: ¨Largo, vete antes de que te meta un sapo en la panza y te mueras¨. Ja, no mame... Para los dos segundos siguientes yo ya estaba metida en mi cama llorando sin mi pelota y con un pinche ataque de hipo de satan.Pinche vieja...
Y si, asi fue mientras pudo atormentarnos. Pero ahora tiene nietos, y son ojetes, peor que ella, mucho peor, gritan, la patean y si son gordos gordos gordos, quizas se deba a que algun vengativo les ha metido un sapo como Patas Verdes en la panza.

4 comments:

el7palabras said...

BRAVOOOOOO
BRAVOOOOOO

Chingá, Clau; es usté artista.

Y esa chinche ruca, qué bueno. Las cosas caen por su propio peso y se regresan rioluded con los años... Aaaaaguas.
Aaaguas.

Ivanius said...

El karma de la señora fue obtener esos nietos... y convertie en personaje de un muy entretenido post.

Aplausos.

la MaLquEridA said...

Mi vecina también era de oaxaca, y siempre persignaba su casa antes de entrar y despues de salir, y agarraba a cualquier chamaco para que le cargara sus cajas cuando se iba a su pueblo.
Cuando los chamacos la veían se escondían porque ya sabían que los iba a poner a cargar.

El anónimo que sí pone su nombre said...

ahhhh pues ta bien no?